En esta oportunidad hablaré del concepto gastronómico y la línea central de los productos que se ofrecen en un restaurante.
Cuando se define el concepto del negocio, es muy importante establecer las licencias en la oferta del menú que se pueden permitir dentro de la carta, que no riñan y confundan al cliente, hasta el punto que se pierda el concepto principal del restaurante.
En esta oportunidad mi historia sucedió en un restaurante “Mexicano”.
¿Qué espero encontrar en el menú?
Obviamente una oferta gastronómica mexicana.
La sorpresa llegó cuando en la carta menú encuentro en primer lugar entradas típicas “Colombianas”.
¿Qué sucedió?
En virtud de querer flexibilizar el menú con el fin de ampliar el mercado objetivo, el restaurante tomó la decisión de incluir las delicias de otra línea gastronómica completamente diferente, generando un conflicto con el concepto original del negocio.
El diseño del concepto de un restaurante es la integralidad y concordancia de lo qué se ofrece (producto), dónde se ofrece (ambiente) y cómo se atiende (servicio).
Por esta razón cuando se seleccionan conceptos gastronómicos típicos de una región, cada aspecto debe respetarse para lograr el correcto posicionamiento del negocio y evitar decepciones en los clientes… porque si yo hubiera querido entradas típicas colombianas, seguro no hubiera ido a un restaurante mexicano.